lunes, 5 de octubre de 2009

Llaima

Mira bien esta boca espuria:
Es ella la que te va a comer.
Acércate resignado
Aun sabiendo que vas a morir.
Soy un túnel, un abismo;
La fuerza que gravita
Y te pierde en el delirio.
Resucitado eres volcán
Y mi rostro es la ladera
Que se ciega con tu lava.
Orgullosa soy tu perra,
Fervorosa me arrodillo,
Dedicada soy tu geisha.
(Soy ahora la que manda
La que ordena y satisface.)
Esta boca que tú odias
Cuando grito y te maldigo
Es la misma que ahora anhelas
Y le ruegas que no pare
No me amas (no me miras)
No te amo (no te miro)
Pero ahora el paraíso
Es mi lengua,
Es mi garganta,
Y tus manos me retienen
(Yo soy la libertad
Que tu cauce necesita).
Un espasmo, un gemido
Algo tibio me sofoca
Y a tus hijos los devoro
Cual Medea en agonía.